Cremas para usar después de la depilación láser

Tras someternos a un tratamiento de depilación láser, la piel del área tratada presenta un edema perifolicular, debido a la transmisión de calor que se produce al quemarse el folículo piloso a los tejidos circundantes, incluso puede presentar un leve eritema o enrojecimiento.

Aunque esto nos indica que la sesión ha sido efectiva, debemos ayudar a que nuestra piel se recupere después de cada sesión aplicando un producto que regenere, hidrate y calme.

Dicho producto, lo aplicaremos inmediatamente después de la sesión y también durante la siguiente semana. Lo más importante a la hora de escoger el producto es fijarse en su composición, para ver que si está libre de alcohol o perfumes que pueden irritar nuestra piel.

¿Qué productos recomendamos?

El aloe vera

Es el más utilizado y recomendado para calmar nuestra piel tras la depilación. Puedes utilizarlo en su forma de gel comercial o extraerlo directamente de la planta. En este caso, utilizaremos la pulpa, es decir, la parte transparente de las hojas. Esta planta tiene grandes propiedades hidratantes, y oxigena y fortalece las células de la piel, ayudando así a mejorar la flexibilidad y el rejuvenecimiento de ésta. Además, sus beneficios van mucho más allá, pues puedes usar el aloe vera para calmar las molestias y el enrojecimiento de la piel y refrescar la misma después de cada sesión. En Dermasana recomendamos utilizar aloe vera, pues aporta una sensación extra de frescor a la piel. Además, en nuestros centros puedes adquirir un bote de gel de 500 ml, indicado especialmente para la post-depilación, por solo 10€.

Aceite de rosa de mosqueta

Es uno de los aceites más utilizados, debido a la gran variedad de beneficios que nos ofrece dentro del mundo de la cosmética.  Actúa calmando la piel y mejorando su aspecto y color. Además, previene la formación de mancha. Sus ácidos grasos esenciales tienen un efecto en las membranas de las células,  que mejora su elasticidad por la producción de elastina, y evita la pérdida de agua. El aceite de rosa de mosqueta nos ayuda a regenerar la piel dañada y disminuye la inflamación después del tratamiento de depilación. Lo puedes adquirir en puntos de venta como parafarmacias, perfumerías o herbolarios. Y es más caro que el aloe vera.

Aceite de argán

El aceite de argán se extrae de las semillas de árbol de argán, nativo del suroeste de Marruecos, y tiene muchas aplicaciones en cosmética igual que el aceite de rosa de mosqueta. Es un potente regenerador, pues nutre la piel intensamente gracias a la cantidad de antioxidantes que contiene. Su alto contenido en ácidos grasos ayuda a mantener una óptima hidratación de los tejidos, y además, tiene un efecto relajante sobre la piel. A la hora de adquirir el producto, es importante que elijas siempre uno que no contenga ni alcohol ni perfumes, pues podrían irritar la piel.

Protégete del sol

Durante los 10 días siguientes a la sesión, debemos evitar llevar las zonas tratadas al descubierto, pues la acción del sol sobre la piel puede provocar la aparición de manchas. En la cara, recomendamos el uso diario de cremas con filtro solar de pantalla total (50 SPF o superior), que hay que renovar cada dos-tres horas o cada vez que salgamos al exterior.

Renueva tu piel

Pasados siete días de la sesión haremos una exfoliación de la zona para ayudar a que el pelo muerto vaya saliendo y cayendo. Recomendamos realizarla en la ducha, cada semana o 15 días. Actualmente, en el mercado podemos encontrar todo tipo de exfoliantes para limpiar y purificar la piel, eliminando impurezas y células muertas. Lo puedes aplicar con ayuda de una esponja o directamente con tus manos. También podemos encontrar esponjas que por su textura son exfoliantes.

La exfoliación se debe realizar siempre con la piel húmeda, incidiendo en las zonas más conflictivas, como por ejemplo los codos o las rodillas. Para terminar, después de realizar la exfoliación, es muy importante hidratar la piel aplicando una crema hidratante o aceite corporal por todo el cuerpo. Si la exfoliación es facial, hay que tener en cuenta que la piel es más delicada, por lo que debemos llevar más cuidado y utilizar productos específicos para el rostro. Aplica una pequeña cantidad de producto y masajea por todo el rostro previamente humedecido, evitando la zona de los ojos y los labios. Después, aclara el producto con agua abundante, seca a toquecitos con una toalla y aplica una crema hidratante adecuada a tu tipo de cutis.

Si tienes alguna duda o quieres más información sobre nuestros tratamientos ponte en contacto ahora con nuestro equipo de expertos.