En ocasiones la depilación láser puede constituir un proceso estético molesto para hombres y mujeres. En estos casos se recomienda la utilización de cremas anestésicas de uso tópico por parte de los profesionales. Se suelen usar para quitar sensibilidad de la piel en las zonas más sensibles y se pueden aplicar en cualquier parte del cuerpo, incluso para la mucosa genital.
¿De dónde viene la anestesia local?
La anestesia local nació en el siglo XIX. En 1904 Alfred Einhorn introdujo la procaína, siendo este el primer anestésico local seguro. Hasta la introducción de la lidocaína, fue el anestésico local más utilizado en el mundo; pero actualmente la lidocaína está considerada como el anestésico local de elección. El motivo reside en la forma en que se metabolizan una y otra. La procaína se metaboliza por la acción de la enzima seudocolinesterasa, presente en el hígado, y en el plasma en ácido paminobenzoico (PABA) y en dietil-aminoetanol (DEAE). Así, los metabolitos rápidamente se inactivan. En cambio, la lidocaína solo se metaboliza en el hígado. Los metabolitos resultantes permanecen activos durante unas horas pero sin actividad anestésica, hasta que se eliminan.
En cualquier caso, ambas son sustancias que permiten interrumpir la conexión con el tejido nervioso. De hecho, anestesia proviene de la palabra griega anaiszesia, que significa “insensibilidad”.
Los avances registrados en estos fármacos han sido notables a lo largo de los años, lo que ha derivado en la existencia de dos grandes familias de anestésicos locales:
- Anestésicos locales del grupo Éster: son los más antiguos (benzocaína, tetracaína, clorprocaína y la ya mencionada procaína). Se encuentran casi en desuso, ya que su efecto es relativamente corto y puede ocasionar varias reacciones secundarias, principalmente alergia, sangrados e infección.
- Anestésicos locales del grupo Amida: son más modernos y presentan múltiples ventajas respecto a los anteriores, sobre todo porque tienen menor incidencia de efectos adversos. Forman parte de este grupo sustancias como: lidocaína, bupivacaína, mepivacaína, prilocaína y ropivacaína.
Además, muchas preparaciones comerciales de anestésicos locales también contienen algún vasoconstrictor – que provoca el cierre de las vías sanguíneas, como noradrenalina o adrenalina, a fin de prevenir que el medicamento pase a la sangre y desaparezca del sitio donde se desea que actúe – y vasodilatador en el área de la piel tratada. Al final, esta reacción prolonga su efecto. Ejemplo de ello lo podemos encontrar en la crema anestésica Lambdalina.
Por otra parte, vale la pena recordar que la industria farmacéutica ha desarrollado gran variedad de presentaciones de estos productos, a fin de ajustarse adecuadamente a las necesidades de cada caso: anestésicos inyectables (empleados en la consulta con el dentista, por ejemplo), aerosol (común en lesiones deportivas), gel y parches.
Cremas anestésicas que se utilizan en la depilación láser
Emla: (siglas en inglés de ‘Mezcla Eutéctica de Anestésicos Locales). Composición: 1g de crema contiene 25 mg de lidocaína y 25 mg de prilocaína. Los demás componentes son carboxipolimetileno, aceite de ricino polixihidrogenado, hidróxido sódico y agua purificada.
- Presentación: 5g, 25mg, 5 g, 30g tubos de aluminio.
- Efectos en el organismo: Aplicación dérmica: 30 min y mucosa: 2-5min.
- Efecto máximo: A los 90 – 120 minutos de la aplicación sobre la piel.
- Duración: 1 – 5 horas desde su aplicación.
- Metabolización: Hepático
- Eliminación: Por vía renal principalmente (en orina).
- Precio: alrededor de los 16 euros sin receta. Con receta podría costar más o menos la mitad.
- Dónde comprarla: Farmacias
Lambdalina: Composición: 1 g de crema contiene 40 mg de lidocaína. Los demás componentes son agua purificada, propilenglicol, lecitina de soja hidrogenada, alcohol bencílico, polisorbato 80, carbómero 940, trolamina, colesterol.
- Presentación: 5 g, 10g, 20g, 30g, 40g, 50g en tubos de aluminio.
- Efectos en el organismo: Aplicación dérmica: 30 min y mucosa: 2-5min.
- Efecto máximo: A los 90 – 120 minutos de la aplicación sobre la piel.
- Duración: 1 – 5 horas desde su aplicación. Metabolización: Hepático.
- Eliminación: Por vía renal principalmente (en orina).
- Precio: alrededor de los 16 euros sin receta. Con receta podría costar más o menos la mitad.
- Dónde comprarla: Farmacias
Uso de las cremas anestésicas
- Lavar cuidadosamente la zona de piel que hay que tratar y secarla bien
- Aplicar una capa espesa uniforme de crema sobre la piel. La dosis recomendada es de 2 a 3 g para anestesiar una pequeña superficie de piel. Si la zona que hay que tratar es mayor, la posología recomendada es 1 a 1,5 g de crema para 10 cm2 de piel
- Recubrir la piel con un film plástico o vendaje oclusivo durante 1h ó 1h 30min. El tiempo máximo debe ser de 2h. En las mucosas genitales el tiempo de aplicación puede variar de 5 a 15 minutos
- Retirar el film plástico o el vendaje y después limpiar bien la piel con toallitas húmedas
- No se debe utilizar más de un envase en una sesión
Efectos adversos de las cremas anestésicas
- Entumecimiento, dolor de cabeza
- Irritación ocular si entra en contacto con los ojos
- Sensaciones cutáneas (enrojecimiento, picores, calor, quemazón) en la zona de aplicación
- Alteración del gusto
- Visión borrosa
- Zumbido en los oídos
- Reacciones alérgicas cutáneas y benignas (enrojecimientos, eczema) y, en casos raros, una grave reacción alérgica generalizada como un choque anafiláctico.
Medicamentos que pueden interactuar
- Acetaminofeno
- Cloroquina
- Dapsona
- Medicamentos para controlar el ritmo cardiaco
- Nitratos tales como nitroglicerina y nitroprusiato
- Otras pomadas, cremas o aerosoles que pueden contener medicamento anestésico
- Fenobarbital
- Fenitoína Quinina
- Antibióticos: sulfonamidas, tales como sulfacetamida, sulfametoxasol, sulfasalazina y otros
- Benzocaína
Además, el uso de las cremas anestésicas puede enmascarar algún posible dolor durante las sesiones, como por ejemplo, las quemaduras, que de otro modo sentiríamos. Si no avisamos con tiempo de estas lesiones, es decir, en el momento en el que están ocurriendo, y el especialista no las trata a tiempo, se pueden producir cicatrices antiestéticas.
Aunque estos productos se puedan adquirir sin receta médica, no debemos olvidar que son medicamentos. El problema aquí reside en que su utilización no controlada por un médico o sin un correcto conocimiento previo de su uso, puede provocar efectos no deseados y descontrolados.
Recomendaciones
Debido al incremento de los centros de depilación láser y de la recomendación de los técnicos para el uso de las cremas anestésicas, las autoridades sanitarias han dado una serie de recomendaciones al respecto. Por ejemplo, la FDA americana (Food and Drugs Administration) ha alertado a profesionales sanitarios y usuarios sobre el uso indebido de cremas anestésicas durante los tratamientos de depilación láser. La lista de consejos de la asociación es la que sigue:
- No usar estas cremas anestésicas sin consultar con el médico
- No utilizar mucha cantidad de crema, debemos aplicar sólo la recomendada
- No debemos usar la crema para grandes extensiones de piel (cuidado con la depilación de zonas extensas como piernas enteras)
- No aplicar el producto en la piel irritada, con erupciones cutáneas, cortes, abrasiones, u otras heridas (por ejemplo, por alguna quemadura de la sesión láser anterior) o en mucosas, ya que en esos casos la absorción es mayor
- Evitar aplicar calor en estas zonas tratadas con la crema anestésica, ya que el aumento de temperatura también puede incrementar la absorción sistémica
- No usar estas cremas en el embarazo, atraviesan la placenta y pueden ser absorbidas por los tejidos fetales.
- Precaución con la lidocaína y la prilocaína en la lactancia, se excretan en la leche materna en pequeñas cantidades
Todo esto no quiere decir que las cremas anestésicas no se deban usar y que sean completamente negativas. Su uso correcto y supervisado puede evitarnos el pasar un mal rato. Cualquier medicamento utilizado en su justa medida es bueno. Pero sí es importante, leer bien las instrucciones de uso y utilizarlo correctamente para evitar cualquier problema. Así, la depilación láser tendrá buenos resultados.
Conservación de las cremas anestésicas
- Mantener fuera del alcance de los niños
- Utilizarlas antes de la fecha de caducidad que aparece en la caja
- Una vez abierto el tubo su caducidad es de 6 meses No conservar a temperatura superior a 30ºC
- Los medicamentos no se deben tirar por los desagües, ni a la basura.
- Preguntar al farmacéutico cómo deshacerse de los envases y medicamentos que no se necesitan
- No refrigerar, ni congelar
Es recomendable usar las cremas anestésicas en la piel porque reducen un gran porcentaje de las molestias que pueda ocasionar la depilación láser y para que el tratamiento sea más llevadero por parte del cliente.
Si tienes alguna duda o quieres más información ponte en contacto ahora con nuestro equipo de expertos.